El cáncer de mama es considerado la neoplasia maligna femenina con mayor incidencia a nivel mundial, según datos de la OMS en América Latina se diagnostican cerca de 500 mil casos cada año, y se espera que para el 2040 el aumento de los casos en esta región aumente en 39 %, la mortalidad por esta enfermedad va de la mano con el acceso a los servicios de diagnóstico y tratamiento.
En Honduras según datos del Observatorio global del cáncer, la patología oncológica de la mama también es considerada como la primera causa de enfermedad oncológica femenina seguido del cáncer cervicouterino y cáncer de tiroides, lo que realmente representa un problema de salud para el país y a la vez un reto para el mismo sistema.
Esta enfermedad es una de las pocas que tiene un método de pesquisa o método de diagnóstico precoz, este método es la mamografía la cual deberá realizarse de forma anual después de los 40 años, sin embargo, aquellas mujeres con factores de riesgo de herencia de cáncer de mama pudieran necesitar métodos de diagnóstico a edades más tempranas.
Es una enfermedad cuyos factores de riesgo son múltiples y van desde la herencia familiar hasta los estilos de vida propios, algunos de estos factores de riesgo son perfectamente modificables.
El diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad conlleva varios pasos e intervienen varios médicos especialistas en cada una de las áreas dedicadas al manejo de las enfermedades oncológicas. Se necesitarán estudios de imágenes como ultrasonido, mamografía o tomografías, estudios de biopsia del tumor y estudios moleculares especiales, marcadores tumorales, etc.
En cuanto a las opciones de tratamiento son multimodales y el uso o combinación de las mismas dependerá del diagnóstico molecular de la enfermedad, de la etapa clínica y las opciones disponibles en cada institución. Dentro de las opciones terapéuticas se incluyen la cirugía, la quimioterapia, radioterapia, tratamientos hormonales o tratamientos muy modernos con la inmunoterapia o terapias biológicas, su uso y combinación deberán ser orientadas por un médico especialista.
Si queremos revertir las tasas altas de mortalidad, o los diagnósticos tardíos debemos implementar la cultura de la medicina de prevención. Recuerda que, si tienes 40 años o más debes realizarte la evaluación anual. Si tienes alta herencia familiar de cáncer de mama debes acudir a tu médico para recibir atención y orientación.
Un diagnóstico a tiempo, salva vidas.
Dr. Olvin Reyes Perdomo
Especialista en oncología
Fuente: OMS, ESMO, Globocan